Misterioso, romántico... Nunca antes fue tan dulce y sensual la venganza.
Manuel Ramos
1 comentario:
Chajaira
dijo...
Un relato cargado de un erotismo morboso, de obsesiones humanas que se esconden en esos recovecos de la mente y que podrían ser activados en cualquier momento por alguna emoción. Nos adentras en situaciones clásicas tales como la burguesía, paisajes tras la ventanilla de un tren, olores a humedad, añoranzas de un hombre solitario, que en un principio hasta nos puede dar lástima “… inocente aventura…” llega a decir nuestro personaje. Su pena se envuelve de sensaciones eróticas y sensibles, confundiéndonos hasta en poder resultar amorosas ¡Ay, el amor! ¡Ay, la necesidad! Al final, todo parece acabar en una egolatría siniestra, qué fácil fue sentir amor, pasión, venganza o el placer de matar… Todos buscaban lo mismo, satisfacer alguna necesidad.
Pulcro, refinado, intenso, como lo son tus textos siempre. Un cordial saludo.
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Un relato cargado de un erotismo morboso, de obsesiones humanas que se esconden en esos recovecos de la mente y que podrían ser activados en cualquier momento por alguna emoción.
Nos adentras en situaciones clásicas tales como la burguesía, paisajes tras la ventanilla de un tren, olores a humedad, añoranzas de un hombre solitario, que en un principio hasta nos puede dar lástima “… inocente aventura…” llega a decir nuestro personaje. Su pena se envuelve de sensaciones eróticas y sensibles, confundiéndonos hasta en poder resultar amorosas ¡Ay, el amor! ¡Ay, la necesidad!
Al final, todo parece acabar en una egolatría siniestra, qué fácil fue sentir amor, pasión, venganza o el placer de matar… Todos buscaban lo mismo, satisfacer alguna necesidad.
Pulcro, refinado, intenso, como lo son tus textos siempre. Un cordial saludo.
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